Dicen
que lo mejor de Colombia son los colombianos y lo cierto es que por ahora el
dicho se ha cumplido. Amanecí en Pasto y lo primero que tenía en mente era
sacarme un seguro obligatorio para la moto llamado SOAT (Seguro Obligatorio de
Accidentes de Transito). Ayer, el de la aduana me dijo que me lo sacase nada
más cruzar la frontera pero entre que era tarde y que se estaba haciendo de
noche pensé que sería mejor idea sacármelo por la mañana. Así que me puse manos a la obra. Primero pregunté a la del hostal si sabía dónde
sacármelo. No tenía ni idea pero me acompañó hasta una tienda tipo badulaque de
los Simpsons dónde vendían de todo, hasta el tal SOAT. La dueña de la tienda me
dijo que ella no estaba autorizada a vendérmelo pero hizo unas cuantas llamadas
de teléfono para averiguar dónde podría sacármelo. Me encantó una de las frases
que le dijo a uno de sus interlocutores que fue algo así como: -Hola mi amor,
necesito que me hagas un “fa” (por “favor”, se entiende…) Una vez que averiguó
dónde podría ir a sacarme el seguro, me hizo un planito para que pudiese
llegar. Con el plano en la mano y ya montado encima de la moto para la plaza de
Pasto que me fui. Cuando llegué a la plaza de marras con cara de despistado, me
abordó un señor y me dijo si necesitaba ayuda. Le dije que estaba buscando para
hacerme un seguro, que bla, bla, bla… Me dijo que aparcase detrás de su coche y
que le acompañase pues conocía dónde podría sacarlo. A la oficina de seguros que llegamos, todo
fueron gorrazos para “el doctor” (el doctor era quien me había abordado) y
resultó que en esa oficina tampoco estaban autorizados a hacérmelo. Me resigné
pues a tener que esperar al lunes para sacarlo. Cuando ya estaba a punto de
volverme a montar en la moto y salir pitando, se me acercó de nuevo “el doctor”
y me dijo que había hablado por teléfono con un conocido que sí que podría
hacerme el seguro. Me acompañó hasta la oficina que estaba a un par de
manzanas, nada más llegar dijo que yo era su buen amigo de España y que
necesitaba sacarme un seguro. En cuestión de 15 minutos me lo dieron, volvimos
dónde había dejado la moto, le agradecí 70 veces que me hubiese ayudado a
resolver la papeleta y nos despedimos. Esto en Bolivia, no pasa, aquí… sí.
Muchas gracias por todo Alex!!!
Hay
que decir que Colombia (cómo también le pasa a Ecuador) tiene una orografía
“delicada”. Son montañas y montañas y para hacer carreteras aquí se las tienen
que ver y desear. Las carreteras no están mal pero son curvas, curvas y más
curvas y las distancias se eternizan. Hoy no he hecho más de 250 kilómetros y
he tardado casi 5 horas. Entre las curvas, las
subidas, las bajadas, los camiones y las obras, es complicado hacer medias de
más de 50km/h.
Orografía colombian |
Mi intención después de los consejos que me dio mi amigo Alex era llegar
hasta Cali. Llegando a Popayán me quedaban aún un par de horas más de camino pero
he visto que el cielo se estaba poniendo muy negro, por donde en teoría tenía
que ir, y he decidido pararme aquí en vez de continuar. Creo que ha sido la
decisión más acertada que he tomado en todo este viaje porque ha sido encontrar
un hotel, entrar a preguntar si tenían sitio para mi y apenas he entrado en la
recepción ha empezado a diluviar. Llevo casi tres horas aquí y no ha dejado de
llover. No quiero imaginar cómo hubiese llegado a Cali.
Algo
que me ha sorprendido de lo que he visto hoy en Colombia es la cantidad de
policía y de militares que hay en la carretera. Lo de la policía la verdad es
que es generalizado en toda Sudamérica, hay un montón de policías por todos
lados, en especial en las ciudades. No sé si es un tema de inseguridad o es un
medio más de emplear gente. En Quito aluciné con la cantidad de policía que
había en la calle. El caso es que aquí, además de policía hay bastantes
militares. Los policías van en moto, a veces dos en una y con unos fusiles en
ristre que para qué.
Los militares los he visto cuando he cruzado algunos
pueblos.
Además de militares he visto una serie de pancartas en las que decía
que la presencia de militares da seguridad a la zona y bla, bla, bla. También
he visto algún cartel que otro que hablaba del “desarme” y de si la guerrilla
esto o lo otro. La verdad es que me gustaría hablar con algún colombiano sobre
el tema y que me informase, lo que no sé es si se trata de un tema delicado o
no y lo mismo me manda al carajo. También me gustaría saber si esta zona ha
sido muy “guerrillera”. Pensaba que la zona más delicada era la que estaba lindando con Venezuela pero viendo tanto militar ahora me han entrado las
dudas. Tendré que enterarme.
Con
tanta policía en la carretera, es de cajón que una pillada te van a hacer. Llegando
a un pueblo he adelantado a un camión en doble línea continua (aquí lo hace
todo Dios, hasta la policía ayer) y no sé si ha sido por el pirulón o porque me he quedado mirando al
policía o por curiosidad que me ha dado el alto. Cuando he
parado me ha pedido la documentación y cuando se la he dado y ha visto que era
española, me ha preguntado que de dónde era. Cuando le he dicho que de
Madrid, me ha preguntado si me gustaba el futbol y que él era un gran seguidor
de Radamel Falcao. Visto el percal me he mimetizado con el terreno y he
empezado a cantar: -ole, ole, ole… Cholo Simeone!! Acto seguido he empezado a
dar unos botecitos y cuando el policía me ha preguntado qué era lo que estaba
haciendo le he dicho: - joder!!!, un bote, dos botes, tres botes… vikingo el que no
bote!!! Después de un rato de cháchara, de comentar las últimas victorias del
Atleti, sus futuros compromisos y lo bien que iba mi moto, me ha dado los
papeles, me ha dicho que condujese con cuidado y yo le he prometido que en
cuanto hablase con mi padre por Skype le iba a preguntar: -papá, por qué somos
del Atleti??? (Como se entere Florentino de todo esto me quita el carnet de
socio)
Un
amigo me ha dicho que me paso el día poniendo en el blog un montón de "experiencias religiosas" y chascarrillos pero que no cuento nada de información
práctica para alguien que leyese esto y estuviese interesado en hacer un viaje
como este. Si no lo hago es porque en su momento cuando estuve “organizando”
este viaje leí más bien poco sobre las cosas que me iba a encontrar para, como
ya he dicho en más de una ocasión, vivir las cosas en el momento y no mientras
lo estaba organizando. Para darle satisfacción y que así luego no me de gritos, puedo contar por ejemplo que para entrar en Colombia se necesita tener
fotocopia del pasaporte, de la hoja del pasaporte donde aparece el sello de
entrada (hay sitios donde sacar fotocopias al lado de la frontera), del permiso
de circulación y del carnet de conducir. Yo me he traído copias hechas de todo
desde España salvo la copia con el sello de entrada que la he hecho, las veces
que me lo han pedido, en la propia frontera. En ningún país salvo en mi querida
Bolivia me han pedido ningún tipo de tasa de entrada ni nada por el estilo.
Como
dato curioso, en algunos peajes de Argentina, en todos los de Chile y Ecuador se tiene que pagar peaje, en el resto de países no se paga. No es que sean muy
caros pero, pagar en un peaje cuando vas en moto es un engorro. Para, quítate el
guante, coge el dinero, paga, coge la vuelta, ponte el guante otra vez,
arranca… En algunos sitios pasas por el mismo carril que los demás y en
Colombia por ejemplo hay un carril dedicado que es casi más complicado pasar
por él que lo era pasar por la barra esa que ponían en el examen del carnet de
conducir de moto en el pleistoceno (ahora creo que lo hacen de otra forma)
Respecto
al seguro del que he hablado antes, en Argentina por ejemplo no me daban la
moto si no tenía un seguro argentino. El que me saqué me cubría en Argentina,
Chile, Bolivia y Perú. En Chile y en Bolivia ni te preguntan al entrar pero en
Perú si no lo tienes antes de entrar en el país, no te dejan pasar. En Ecuador
te lo recomiendan pero yo me lo he cruzado entero sin seguro. Ahora mismo no se
me ocurren más cosas. Siento haberlo puesto todo junto, lo debería haber puesto
por país pero es lo que hay. En el futuro si retoco algo el blog prometo poner
este tipo de información donde corresponde.
Hoy
no me han pasado grandes cosas pero la verdad es que estoy contento. Lo que he
visto me ha gustado y encontrarte gente maja hace que el viaje sea más
agradable. Además me he librado de una chupa de cuidado así que… ha sido un
buen día.
La etapa del día |